
El deporte español y del mundo entero perdió al más grande. El zamorano, vallecano e ídolo mundial del motociclismo, Angel Nieto, falleció hace unas horas en Ibiza a los 70 años de edad como consecuencia del traumatismo craneal, producto del accidente de tráfico que sufrió el pasado 26 de julio cuando conducía su quad en su amada Ibiza.
La Casa Real, el Gobierno Español, el Comité Olímpico Español y el Consejo Superior de Deportes fueron los primeros en lamentar públicamente el fallecimiento del que fue trece veces –aunque a él le gustaba decir 12+1– campeón del mundo.
Angel Nieto había nacido en Zamora el 25 de enero de 1947 en el seno de una familia humilde y muy pronto se trasladó a vivir a Madrid, concretamente al barrio de Vallecas. Su pasión por las motos le llevó a Barcelona para empezar trabajando en Bultaco, luego en Ducati y posteriormente en Derbi. En el mes de febrero de 1965 firmó su primer contrato profesional con Ducati.
Sus dos primeros grandes premios los consiguió en 1969. Defendió con enorme profesionalidad marcas como Derbi, Morbidelli, Kreidler, Minarelli, Garrelli y Bultaco. Su carrera fue tan brillante, por eso fue el gran grande, porque en los años 1969, 1970, 1972, 1975, 1976 y 1977 se proclamó campeón del Mundo en la categoría de 50 centímetros cúbicos. En la categoría de 125 cc fue campeón en siete ocasiones: 1971, 1972, 1979, 1981, 1982, 1983 y 1984, siendo en cuatro ocasiones sub campeón del mundo.
En sus años de profesional del motociclismo mundial logró noventa grandes premios (27 en 50 centímetros cúbicos, 62 en 125 y 1 en 80 c.c. A eso hay que sumarle que fue la gran estrella en los campeonatos de España, ya que logró 23 victorias en diferentes cilindradas.
Tras finalizar su carrera deportiva como piloto paso unos años como director deportivo y dentro del mundo de los equipos para dedicarse posteriormente a la comunicación, ofreciendo sus inigualables comentarios y toda su sabiduría y experiencia en el mundo de las motos, tanto en Televisión Española y en Mediaset. Sus pasos en los circuitos los siguieron sus hijos Gelete y Pablo y su sobrino Fonsi Nieto, que hoy lloran al que todos denominan “el más grande, el mejor padre, el mejor amigo y el mejor deportista”.