El mundo del periodismo, la cultura y el deporte, más en concreto el ciclismo, ha sufrido una gran pérdida el mismo día del patrón de los periodistas (San Francisco de Sales). Ángel María de Pablos, la gran voz del ciclismo en Televisión Española que dio paso después a Pedro González y Carlos de Andrés, ha fallecido en su Valladolid natal a los 81 años como consecuencia de una serie de complicaciones a raíz de una operación de cadera.
Miembro de la Asociación de la Prensa Deportiva de Valladolid, creó la Federación de Asociaciones de la Prensa Deportiva de Castilla y León, que encabezó durante doce años y que llevó a cabo la organización de las galas provinciales del deporte así como del montaje y la coordinación de la Gala del Deporte Regional. Fue uno de los pilares de la nueva AEPD en la Comunidad castellanoleonesa. Su opinión, siempre coherente y ponderada, ayudó mucho en congresos y reuniones de la Asociación Española de la Prensa Deportiva.
Ángel María de Pablos (DIARIO DE VALLADOLID-EL MUNDO).
Periodista, poeta y escritor, Ángel María de Pablos se hizo popular en la televisión al frente de las retransmisiones de ciclismo en los ochenta. TVE recurrió a él para poner la voz a los primeros años de las retransmisiones de finales de etapa de la Vuelta a España, entre 1983 y 1988, acompañado de Emilio Tamargo, Ramón Pizarro y Rafael Recio. Su singular estilo hizo muchos aficionados al ciclismo puesto que no sólo narraba el desarrollo de lacarrera, sino que completaba sus comentarios echando mano de su prolijo acervo cultural con descripciones históricas, culturales, literarias y paisajísticas de los lugares por donde pasaba la serpiente multicolor.
Porque, antes de nada, fue poeta desde que muy niño comenzara a escribir de la mano de su padre, el también periodista, ensayista y poeta Ángel de Pablos Chapado (1911-1983). Fue precisamente su padre quien le enroló en El Norte de Castilla con solo 14 años, principio de una trayectoria periodística reconocida por la profesión en 2020 con la entrega del Premio Francisco de Cossío a la Trayectoria, galardón que convoca cada año la Junta de Castilla y León. Hace casi tres décadas formó parte de la redacción fundacional del diario El Mundo de Valladolid, del que fue jefe de Deportes y de Cultura.
Fue un excelente poeta como acreditan los numerosos libros publicados, entre ellos ‘Los niños del basurero y otros lamentos’ (2002), con una mirada que con frecuencia proyectó hacia los más desamparados fruto de un sentido cristiano y solidario que también desplegó como hermano, durante décadas, de la cofradía de las 7 Palabras en la Semana Santa de Valladolid. Precisamente Ángel María de Pablos fue el pregonero de la pasada Semana Santa vallisoletana.
Además de la poesía, aportó títulos al teatro como ‘La fontana’ (2007), sobre los últimos días de Antonio Machado, e incluso se implicó en funciones directivas al frente, entre otras instituciones culturales, del Ateneo de Valladolid y de la Asociación de Amigos del Teatro de Valladolid.
Pero amaba tanto el ciclismo hasta el punto de vivir experiencias como dirigente deportivo. Llegó a ser vicepresidente de la Federación Española, presidente de la territorial en Valladolid y directivo de la Unión Ciclista Internacional (UCI).Sobre este deporte, escribió varios libros de referencia y rigor documental como ‘Historia de la Vuelta Ciclista a España’ (1985) y ‘110 años de ciclismo en Valladolid’ (1994). Descanse en paz.
