El libro histórico de la Vuelta Ciclista a Burgos de Iñaki Sagastume verá la luz en los próximos meses, tras ganar Alberto Contador en las Lagunas de Neila.
Uno de los periodistas deportivos que más sabe de ciclismo y goza de un gran prestigio profesional en el mundo del deporte es Iñaki Sagastume. En los próximos meses verá la luz una gran obra suya que recoge toda la historia de la Vuelta Ciclista a Burgos, que en su última edición ganó Alberto Contador, en una última etapa que se recordará por el exacto control del tiempo empleado para superar el corredor de Pinto a sus dos rivales por sólo un segundo, algo que muy posiblemente no se repita nunca más en el mundo del ciclismo profesional.
La Vuelta Ciclista a Burgos comenzó en 1946, se disputó en el 47 y se recuperó en 1981. Fue el ex ciclista burgalés Isidro “Flequi” Juárez el que le pidió a Iñaki Sagastume que recuperase la ronda de Burgos. Sagastume se puso manos a la obra, la elaboró, la organizó, la dirigió y la encaminó hasta nuestros días. Iñaki compaginó su labor en Burgos como periodista desde Donosti, trabajando con grandes equipos profesionales, como el de José María García, y realizó todas las labores. Tuvo a su lado en Burgos al popular Tito Moreno, y a un grupo humano fenomenal, y llevó la Vuelta a Burgos hasta nuestros días ahora, bajo la dirección de Marcos Moral.
La Diputación de Burgos, que preside César Rico, ha apostado con gran acierto por la Vuelta a Burgos y por un libro que verá muy pronto la luz y que recoge toda la historia de la carrera. El que Alberto Contador logrará la victoria en las Lagunas de Neila el pasado 6 de agosto se ha convertido en un perfecto colofón para la obra que está preparando Iñaki Sagastume, en la actualidad vicesecretario de la Asociación Española de la Prensa Deportiva.
El actual secretario General de la AEPD, Osvaldo Menéndez, quiso asistir junto a César Rico e Iñaki Sagastume a esa última etapa de la Vuelta a Burgos, que comenzó en el hermoso monasterio de Caleruega y que cerrará el libro histórico de la carrera. Ese día todos los amantes del ciclismo que se acercaron a Neila pudieron ver como la ronda burgalesa es un ejemplo de organización, imagen y seriedad, algo que deben comprobar cuanto antes los responsables de la Unión Ciclista Internacional.
